sábado, 18 de noviembre de 2017

Chozas enrocadas.

Con este término quiero definir una serie de tipologías de chozas que nada tienen que ver con las viviendas trogloditas o casas-cuevas, que también estuvieron presentes en la provincia de Córdoba, como el caso muy conocido de Iznajar, también Palma del Río y la sierra de Córdoba, estos últimos menos documentados. 

Estos cinco ejemplos de chozas "enrocadas" se distribuyen por distintos lugares, principalmente en Sierra Morena, donde la construcción aprovechaba en parte o totalmente el afloramiento de la roca madre, principalmente para obtener el cerramiento de alguna de sus paredes. 

Dos casos son de planta rectangular y el resto circulares irregulares. En cuanto a sus cubiertas, fueron de materiales vegetales todas menos una, que pudo ser de bóveda de cañón por aproximación de hiladas. Las vegetales se disponían a una y dos aguas, aprovechando el desnivel del terreno para crear la pendiente del colgadizo.

Las paredes de roca no construida se retocaron y tallaron en algún caso, y no es de extrañar que fueran trabajadas por canteros como frente para extraer bloques de granito, en el caso de las presentes en Los Pedroches (Belalcázar, Cardeña y Torrecampo).


Viñas Viejas (Belalcázar).

Choza de la Muda (Cardeña).

Posible recreación de su aspecto.

Hoya de la Condesa (Torrecampo).
Foto cortesía de  Jesús Cangas

Las Erillas (Villaviciosa de Córdoba).
Foto cortesía de Juan Relaño.


Choza II Fuenfría (Zuheros)


Posible recreación de su aspecto.